Chuck Berry - The Legend

sábado, 10 de octubre de 2009

IG NOBEL: LA CIENCIA SE RÍE DE SÍ MISMA

Premios Ig Nobel
Se están adjudicando estos días los famosos -y muchas veces sobrevalorados- Premios Nobel.
Incluso, en determinadas áreas, desprestigiados Premios Nobel: ¿Se le puede dar el Nobel de la Paz a Henry Kissinger o a Yasir Arafat? ¿Se le debe dar el Nobel de la Paz a Barack Obama, presidente de uno de los países más militaristas del planeta? ¿O es que se fijan solamente en lo políticamente correcto y en lo que "vende" en ese momento? No lo sé.

En fin, digo/decía que se están repartiendo ahora los dichosos premios. A mí no me interesa hoy hablar de ellos, sino de los IG Nobel, premios alternativos que se conceden días antes. La ciencia, al menos una vez al año, se ríe de sí misma y concede galardones a las investigaciones más locas y surrealistas realizadas con toda seriedad por científicos... " pelín iluminados".

Los galardones los otorga la revista científico-humorística Annals Of The Improbable Research para premiar a investigadores cuyos trabajos -según la propia revista- primero hacen reír y luego reflexionar. Son copatricinados por la Asociación de Ciencia-Ficción Harvard-Radcliffe, la Sociedad de estudiantes de Física Harvard-Radcliffe y la Sociedad Computacional de Harvard -todo referencias a Harvard, como ven- y se entregan, cómo no, en la Universidad de Harvard.

Estos son los premios de este año. Los hay realmente buenos:

* Premio Ig Nobel de Veterinaria:
Concedido a Catherine Douglas y Peter Rowlinson, de la Universidad británica de Newcastle, por bautizar vacas. Probaron que las rumiantes con nombres como Daisy, Buttercup o Bessie producen más leche que sus congéneres anónimas.
La investigación de su equipo se concentró en una muestra de 516 vacas y concluyó que, en un plazo de diez meses, las “bautizadas” dieron hasta 270 litros de leche más que las que no tenían nombre.
Douglas dedicó el premio a Purslane, Wendy y Tina, las vacas más amables que dijo haber conocido jamás. La científica no pudo participar personalmente en la ceremonia de entrega del premio porque acaba de tener una niña, pero a cambio envió una foto suya con su hija disfrazada de vaca. ¡Qué menos!

* Premio Ig Nobel de Medicina:
Otorgado al investigador estadounidense Donald Unger por demostrar que hacer crujir los dedos no produce artritis. Cuando era niño, su madre le prohibió la fea costumbre advirtiéndole que se dañaba la mano. Unger resolvió entonces crujirse los dedos todos los días, pero sólo los de la mano izquierda. Después de 60 años (60 años de investigación, díganme si no se merece el premio), el hallazgo fue incontestable: su madre se equivocaba. Me miro los dedos y no veo en ninguna de las dos manos ni el menor indicio de artritis, explicó orgulloso de su descubrimiento el paciente investigador.

* Premio Ig Nobel de la Paz:
Para un equipo de la Universidad de Berna, Suiza. Su investigación intentó dilucidar si, para golpear a alguien en la cabeza, es mejor utilizar una botella de cerveza vacía o una llena. El experimento no reveló grandes diferencias entre una y otra. Ambas son suficientes para romper el cráneo humano. Sin embargo, las vacías son más solidas, explicó Bolliger, un miembro del equipo, en un correo electrónico. Esto se debe a que la presión de la cerveza, ayudada por la carbonación, permite que una botella llena explote más rápido. Me pregunto cómo lo hicieron. Seguro que tuvieron algún problemilla, porque no creo que la mayoría de la gente se dejase dar un botellazo.

* Premio Ig Nobel de Física:
Concedido a un equipo interdisciplinar de tres universidades estadounidenses. Su descubrimiento es portentoso: las mujeres embarazadas no se caen hacia adelante porque tienen una vértebra más que los hombres, lo que las hace más flexibles. Ya ve usted.

* Premio Ig Nobel de Literatura:
Ganadora, la policía irlandesa, que multó más de 50 veces al mayor infractor de tráfico del país: Prawo Jazdy, que en polaco significa licencia de conducir.

* Premio Ig Nobel de Economía:
A los gerentes de los bancos Kaupthing, Landsbanki, Glitnir y Banco Central de Islandia por demostrar que los bancos pequeños se pueden convertir rápidamente en enormes y viceversa. Si es que no nos damos cuenta de los riesgos que corren los pobres bancos, hombre.

* Premio Ig Nobel de Salud Pública:
Elena Bodnar de Hinsdale, Illinois y sus colegas Rafael C. Lee y Sandra Marijan, quienes diseñaron y patentaron un sujetador que rápidamente puede transformarse en un par de máscaras de gas, una para la usuaria y otra para quien la necesite en esos momentos. Útil de verdad.

*Premio Ig Nobel de Biología:
Para tres investigadores japoneses que demostraron que los desechos domésticos pueden ser “destruidos” en un 90% mediante el uso de bacterias extraídas de las heces de pandas gigantes. Ojo, tiene que ser de las heces de pandas gigantes, no vale cualquier otro animal.

* Premio Ig Nobel de Química:
A los investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México - Javier Morales, Miguel Apátiga y Víctor Castaño- que consiguieron obtener del tequila, a través de un proceso químico, microcristales de diamante. Si es que el alcohol tiene una mala prensa completamente inmerecida, se lo digo yo.

* Premio Ig Nobel de Matemáticas:Gideon Gono, Gobernador del Banco de Reserva de Zimbabue, quien para hacer frente a la superinflación que vive su país, emitió unos billetes bancarios que van desde un centavo a 100 billones de dólares zimbabuenses, que vaya usted a saber lo que valen.


El nombre del premio, Ig Nobel, es un juego de palabras entre el apellido Nobel y la expresión inglesa ignoble, que significa tanto ignominioso como absurdo. Pero el galardón, que este año se entregó por decimonona vez, dejó hace tiempo de ser motivo de deshonra. Varios ganadores del Premio Nobel original lo han recibido, por ejemplo el economista Paul Krugman, el químico Martin Chalfie y el escritor Orhan Pamuk.


El fundador y maestro de ceremonias de los premios, Marc Abrahams define la entrega como una mezcla entre los Premios de la Academia, los Premios Nobel y el Circo de los Hermanos Ringling y la idea central es atraer a todas aquellas personas que no les interesa la ciencia, porque la consideren compleja o simplemente aburrida, al ver que estos científicos son también seres humanos con sentido del humor.

El lema oficial es premiar a aquellos individuos cuyas investigaciones no pueden o no deben ser reproducidas. Se otorgan diez premios cada año, no necesariamente en las mismas categorías.

4 comentarios:

Nando dijo...

Cojonudos!! estos premios si que merecen la pena , jejeje

Anónimo dijo...

Gracias por las carcajadas y... la reflexión.

Logan y Lory dijo...

Pues a Obama le han concedido un premio "ignoble" de narices. Hasta él mismo está alucinado de que se lo hayan concedido. Menuda patata caliente.

Juan Nadie dijo...

A ver si con esto se anima y cierra Guantánamo y comienza a sacar de verdad las tropas de los sitios. De paso, podía llevar hasta sus últimas consecuencias el tema ese de la reducción del arsenal nuclear que trató el otro día con otros dirigentes mundiales. Por soñar...